29 de noviembre, 2019

A pesar de transitar una transición ordenada, desde el Frente De Todos en Morón, el intendente electo Lucas Ghi anticipa un panorama preocupante luego de los cuatro años de la gestión de Ramiro Tagliaferro de Juntos por el Cambio. Deuda abultada y grave situación social, falta de insumos en hospitales y escuelas paralizadas por problemas de infraestructura, forman parte del escenario con que se encontrará a partir del 10 de diciembre.
La primera reunión entre ambos tuvo lugar el 29 de octubre, dos días después del triunfo en el que Ghi se impuso por apenas tres puntos sobre el actual jefe comunal. “Acordamos hacer este tránsito lo más ordenado y serio posible. El problema es el resultado, la realidad”, dijo el intendente electo a la prensa. Además, Ghi señaló como una de las principales preocupaciones a la deuda que acumuló el municipio durante los últimos años. “Sólo por el contrato de recolección de residuos hay una deuda que oscila en torno a 500 millones de pesos”, alertó y añadió que “todavía resta precisar lo no imputado, de servicios que se prestaron pero todavía no entraron al sistema de contabilidad”.
Reveló también que los proveedores del hospital municipal de Morón “tienen la cadena de pagos cortada y no cobran desde hace seis meses”. Cabe recordar que hubo reiterados conflictos en el último año producto de la falta de insumos, que paralizó distintos niveles de atención.
La otra deuda que identifican en el Frente De Todos de Morón es la social, que afecta a unas 2.500 familias “que están en una situación delicada y que reciben atención autogestiva, de organizaciones comunitarias e iglesias, pero que muchas no reciben asistencia del municipio”, detalló el mandatario electo y adelantó que ya mantuvo conversaciones con Axel Kicillof y con Daniel Arroyo, futuro ministro de Desarrollo Social de la nación, para avanzar en estrategias para enfrentar la delicada situación social que atraviesa el distrito. “La seguridad alimentaria es una prioridad”, afirmó.
Por otro lado, señaló que “hay entre 18 y 20 escuelas parcial o totalmente clausuradas, que por problemas edilicios no pueden funcionar y necesitan una intervención inmediata”.
Para hacer frente a este panorama, Ghi planea, como otros intendentes electos que se enfrentarán al problema de la deuda en sus municipios, formar “una comisión verificadora de créditos” con el objetivo de “ver la consistencia documental de las acreencias y precisar el monto de la deuda”. Por último, contó que tienen avances sobre el proyecto de presupuesto pero que casi con seguridad deberán postergar su presentación unos meses, para cuando cuenten con un diagnóstico más certero de la situación económico financiera de la Comuna.
“Estamos discutiendo la ordenanza fiscal impositiva del año que viene, pero todavía no tenemos los números, esperamos una reunión con los equipos de Axel para manejarnos en sintonía y ver las coordenadas macroeconómicas que la provincia comparte con los municipios”, concluyó Ghi


Compartir